Los fibromas osificantes, también conocidos como fibromas cemento-osificantes, se refieren a un neoplasma benigno y poco frecuente que aparece en el maxilar. El término «osificante» quiere decir que se transforma en hueso o en tejido óseo, ya que estos tumores a menudo contienen tejido calcificado que se parece al hueso, al cemento dental o a ambos. Los fibromas osificantes suelen presentarse como masas redondas e indoloras que crecen con lentitud y tienen bordes definidos.
¿Cuál es la causa de los fibromas osificantes?
A menudo, los fibromas osificantes se presentan entre la segunda y la cuarta década de vida y son más comunes en las mujeres, lo cual sugiere que las hormonas podrían influir en su desarrollo. De todas formas, los fibromas osificantes se pueden presentar en pacientes de todas las edades y de cualquier sexo. Los traumatismos, la irritación causada por restauraciones dentales y la placa debajo de las encías también pueden jugar un papel en su desarrollo, pero todavía no se conoce su causa exacta.
¿Cuáles son los síntomas de un fibroma osificante?
La primera señal de un fibroma osificante puede ser una inflamación en la cara. Estos tumores de crecimiento lento suelen ser indoloros y asintomáticos, pero, poco a poco, pueden hacer que los dientes se muevan o causar la reabsorción de las raíces. Si usted nota alguna inflamación en su rostro, acuda a su profesional de la salud dental tan pronto como le sea posible para determinar el origen del problema.
Él o ella tomará una radiografía para determinar la ubicación exacta del tumor y confirmar su diagnóstico. Por lo general, el borde definido en su perímetro caracteriza estos crecimientos como fibromas osificantes, pero el aspecto en los rayos X puede variar según la etapa de desarrollo del tumor y el grado de calcificación de la masa.
¿Cuál es el tratamiento para los fibromas osificantes?
El tratamiento para un fibroma osificante suele requerir de una extracción quirúrgica, donde un cirujano o cirujana extirpará la totalidad del tumor del tejido. Los tumores más grandes podrían necesitar de procedimientos más complejos para reconstruir el hueso afectado. Una vez que se haya recuperado, su profesional de la salud dental determinará si hace falta algún tratamiento adicional para restaurar o reemplazar cualquier diente que haya resultado afectado.
Por lo general, la extracción del fibroma osificante resuelve cualquier problema que haya surgido a consecuencia del mismo. Existen varios estudios que estiman que la tasa de recurrencia es del 6.7 % al 28 %. La Revista de Ciencias Dentales y Aliadas (Journal of Dental and Allied Sciences) menciona que la tasa de recurrencia es significativamente más alta en los casos que afectan a niñas y niños. Por ello, es importante que recuerde acudir a consultas de seguimiento regulares con su profesional de la salud dental para monitorear el área.
Al igual que con muchos problemas dentales, un diagnóstico y un tratamiento tempranos del fibroma osificante pueden abrirle las puertas hacia una boca saludable. Si usted observa algún tipo de inflamación o abultamiento a lo largo de sus encías o mandíbula, póngase en contacto con su profesional de la salud dental de inmediato.