Existen al menos cinco realidades acerca de los cepillos de dientes que las personas suelen desconocer o subestimar
El instrumento para limpiar la boca y los hábitos en el baño juegan un papel muy importante a la hora de mantener una boca sana.
Según una serie de artículos recopilados por la BBC, existen al menos cinco realidades acerca de los cepillos de dientes que las personas suelen desconocer o subestimar.
1- Concentran microorganismos
En una entrevista publicada en la revista de la Universidad de Alabama, Maria Geisinger, profesora de periodoncia de la Escuela de Odontología de la Universidad de Alabama explica que la cavidad oral alberga miles de microorganismos que se pueden transferir al cepillo.
Algunos de ellos, enumeró, serían estafilococos, bacterias coliformes, pseudomonas, levadura, bacterias intestinales y gérmenes fecales que quedan en el aire cuando se va al baño.
Las llamadas bacterias entéricas, que en su mayoría viven en los intestinos, pueden pasar a los cepillos y terminar en la boca cuando la persona no se lava las manos antes de tomar el cepillo.
También pueden existir microorganismos antes de comprarlos o de retirar el cepillo del paquete.
2- Peligros en el lugar de guardado
La Asociación Estadounidense Dental recomienda que el cepillo no se guarde en un contenedor cerrado o que se cubra.
Los especialistas sugieren guardar los cepillos en forma vertical y -de ser posible- dejarlos secarlos hasta el siguiente uso.
3-Limpieza
Geisinger recomienda enjuagar a fondo los cepillos con agua potable después del cepillado.
Esto permitirá retirar todos los restos de pasta de dientes y de comida que queden atrapados entre las cerdas.
4- Cuatro pasos
Como parte de la entrevista en diálogo con la revista universitaria, la doctora Geisinger ofreció cuatro consejos: utilizar enjuague bucal antes del cepillado, limpiarse la boca con regularidad, lavarse las manos y no compartir el cepillo de dientes.